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Chile


Ramiro Molina: El sumum de lo abstracto pero visceral

"?No dejen que el sol les robe la oportunidad de ver a un muerto contar su propia historia!... Me fui de aquí en autobús gracias al conjuro de una bruja, ?recuerdan que estaba en los huesos?, tuve que reencarnar siete veces en ese cuerpo antes de juntar suficiente dinero para comprar este, que ahora tengo". ("El pregonero de la calle ciega")

(Entrevista realizada por Milena Bahamonde)


Con textos como este del poeta venezolano Edilio Mujica o con otros de Charles Baudelaire o Franz Kafka o Jorge Luis Borges o Cesar Vallejos, el compositor y arreglador Ramiro Molina inicia las clases de música. Es uno de los involucrados en la enseñanza de la improvisación en la Facultad de Artes de la Universidad de Chile, y además da clases de composición, arreglos y armonía en la Escuela de Música Popular de la SCD, donde es coordinador de la carrera de Composición.

Hombre de espíritu estepario que busca, busca y busca "lo inteligible de la existencia". Es intérprete en guitarra eléctrica, y como compositor tiene un catálogo que supera las 40 obras, entre las que destacan: "Periplo", "Siglo 0", "ABT1", "ABT2", "Dunas y destellos", "Otra ventana oval" y "Noumenos". Parte de este material fue registrado en "Fedón" (disco íntegro con sus creaciones) y en algunos tracks de los cedés "Cuadrivio", "Antología de jazz en Chile" y "Proplapusus".

Ramiro Molina nació en Santiago de Chile el 25 de agosto de 1966. Tiene gustos sencillos, de los que junta zapatos viejos, compra sombreros en la calle, prefiere los papelillos Rizzla naranjas para hacer sus cigarros, y desde hace un tiempo que en lugar de cortarse el pelo, se "pela". Le acomoda más un paseo por la montaña que al mar y a veces se pierde por los derroteros de libros viejos de la calle San Diego. Es vegetariano y cafeinómano. No le hace el quite al ajo, la cebolla, el azafrán, la mostaza, la albahaca, la mantequilla y tampoco al vino tinto. Lo entristece "la ceguera humana que conlleva la ejecución de atrocidades", confiesa.

Cuenta con un buen arsenal de indumentaria musical tecnológica que incluye su primera guitarra estilo Les Paul, otra azul más ácida y una doble mango (un mango con trastes y la otra sin trastes), pre-amplificadores, amplis y efectos (que le quitan cada vez menos el sueño), artículos varios para intervenir y sonorificar la guitarra (desde palillos de tejer pasando por varillas de paraguas, macetas de bombo, monedas hasta esponjas de metal para la loza) y también tiene un par de sillas que cambió por clases de guitarra. Según dice: "el trueque es una forma de socavar al sistema mercantilista". Fuera de lo musical se reconoce un pésimo dibujante y un mal actor cuando se trata de fingir.

Vivió un fragmento de la niñez en Costa Rica, pero fue en Chile donde comenzó a estudiar piano cuando niño. Su primer profesor de guitarra fue George Abufhele con quien aprendió los primeros rudimentos en el trabajo del instrumento y cómo seguir trabajándolos por sí mismo. En adolescencia y juventud escuchó las obras de Ludwig Von Beethoven con tanto deleite como los temas de Emerson Lake and Plamer, y todavía se reconoce rockero. Forma parte de la generación de los ochenta, años en los cuales estudió la carrera de Sonido en la Facultad de Artes de la Universidad de Chile y a la par estuvo en un taller en la Escuela de Jazz de Roberto Lecaros, "un reducto obligado, en esos años, para quienes quisieran saber algo del jazz en Chile", según comentó.

"Roberto (Lecaros) era, al menos en ese tiempo, bastante exigente, duro e impaciente, pero era un maestro, sabía y tenía la 'película' clara aunque supongo que en el ámbito de entregarlo a alguien que quiere aprender el asunto no era tan obvio. Tuve la sensación de entrar al gehto del jazz, algo muy similar a lo que se sentía al entrar al Club de Jazz de Santiago, aunque en este caso era mucho más fuerte esta sensación", recuerda.

Vivía, lo que podría denominarse como el tiempo de sexo, drogas y rock and roll, y estaba en eso cuando de la escena parisina arribo a Chile (en 1989) el violinista Didier Lockwood, quien junto a su agrupación hizo talleres en el Club de Jazz de Santiago a los que Ramiro no faltó.

"Esa experiencia fue un terremoto. Anduve como zombi toda una semana y ya no pude soportar mas la pregunta que me hacía: ?Qué estás haciendo Ramiro Molina? Había dos opciones: O vendía mi guitarra y todo lo que pudiera recordármela y me alejaba de la música, cambiándome de carrera porque tampoco podría soportar estar el resto de mi vida en contacto con músicos; O dejaba la carrera y me dedicaba a lo que había querido desde siempre y establecía la relación que quería con la música. Tomé la segunda. Cerré la puerta con llave detrás de mí y sin mirar atrás ni sacar copia de la llave la tiré al mar. Por ese tiempo recibí un folleto de una Escuela de Jazz en París (?casualidad o causalidad?), del Centre d' Infromations Musicales (CIM). Europa me seducía más que Estados Unidos y me fui a Francia en septiembre de 1990".

Instalado en París estudió en el CIM con Gilles Rennes, un guitarrista bastante técnico de corte bopero-blusero pero más moderno y con influencias de Mike Stern. "Con él aprendí que ya sabía toda la información que necesitaba saber y que la sabía desde hacía tiempo", comenta Molina. También aprendió arreglos con Dennis Bioteau, "un arreglador joven bastante puntilloso". Además, estudió con Claude Py , "con quien pude soltar la muñeca en la escritura orquestal", dice. Además, estudió con el arreglador, compositor y trompetista que integró la Orquesta de Quincy Jones, Ivan Jullien, con Claude Duchet y tuvo como maestro de guitarra a Malo Vallois.

"Recuerdo con extrema nitidez la vez que Malo habló sobre elegir, nos dijo algo así como: 'No existe una vida para leer todos los libros ni para escuchar toda la música que hay. Y existe un libro en algún lugar que al leerlo cambiaría el curso de tu existencia radicalmente, y lo más probable es que jamás te topes con él. Es mejor elegir el conocimiento y trabajo en la música son como un muro: pueden elegirlo todo y moverlo un milímetro o pueden elegir un punto y profundizar y llegar lejos'. Esas palabras en ese instante calaron profundo en mí. Por un momento comprendí lo que llaman el arte sin artificio. En distintas oportunidades nos habló de la teoría del conocimiento aplicada a la guitarra, de la dosificación de la energía al tocar, del trabajo de focalización, del concepto de la espera, de soltar la obligación del estudio por sí mismo y de que después de un cierto punto se aprendía más música aprendiendo de la vida misma que de la música".

La experiencia con los franceses incidió radicalmente en su desarrollo como músico.

"Fue de suma relevancia fue precisamente el poder contactarme directamente, viendo escuchando, percibiendo. El poder ver lo que está pasando ahí y ahora tiene efectos claros en la maduración de un músico, mucho más que cientos de clases".

Sometido a un ritmo diario de estudio que bordeaba las diez horas, la nostalgia y la idealización de Chile calaban fuerte en Ramiro, así luego del tercer año en Francia decidió regresar a su país natal, donde se encuentra con una escena poco feliz.

"Cuando llegue noté una cierta abulia, un entregarse a una situación, una especie de 'meseta intelectual', algo plano sin sobresaltos, sin diversidad, en fin. ?O siempre fue así y yo lo veía ahora? Como sea, los grupos que antaño fueron escena obligada o habían desaparecido o la música se había convertido en una triste auto-clonación: Cometa, Fulano, Al Sur (desaparecido). El club de jazz continuaba siendo el convento de siempre. Pero por otro lado y paradójicamente llegaron a mis oídos rumores pasados de que en toda esta situación probablemente después del retorno a la 'democracia', había sucedido que la palabra cultura se había puesto de moda, y algo similar había pasado con el Jazz, pero duró poco, porque no era real, no era auténtico, era una moda".

La llegada a Chile coincide con un cambio en su postura frente a la música: "Decidí dejar la actitud de estudiante y comenzar a concretar proyectos", dice. Poco a poco aumentó la confianza en sí mismo y comienza la indagación en la pintura, en la composición, en todo el universo simbólico del arte y descubre a Piet Mondrian, quien se convierte en uno de sus más sólidos inspiradores.

"En el ámbito conceptual mi trabajo musical está muy influenciado por los pintores abstractos de principios del siglo XX en particular por Mondrian, lo que me ha permitido tomar ciertos rumbos y direcciones. Una de sus obras preferidas para mí es 'Cuadro I', no la del último periodo neoplasticista sino que la del denominado abstractismo puro. Reconozco que tengo una tendencia al alejamiento de la figuración, para mí no es solo una cuestión de aplicar un divertido juego racional, hay algo que me mueve las vísceras en ello también".

La visible inclinación por las formas abstracta de la pintura de Juan Gris, Georges Braque y Piet Mondrian sedimenta lo que Ramiro llama su "tradición musical", la que comenta:

"En términos concretos la aplicación del concepto de realidad abstracta o abstracionismo puro se hizo ver en la utilización generalizada de estructuras y elementos sin importar la consecuencia convencional de estas sobre la impresión auditiva. Otro elemento importante es el universo textural, que adquiriría ya no una importancia de tipo funcional sino que tendría un valor en sí mismo. Interesante fue comprobar que en la medida que se trabajaba con elementos y estructuras cada vez más básicos y fundamentales se tornaba más clara y evidente la aplicación del concepto en su totalidad, lo que corroboraba los estamentos de Mondrian en relación con la autonomía de las formas puras".

En otras palabras, Ramiro traduce en sus obras el estudio de las obras pictóricas a una visible revalorización de la textura y los elementos musicales formativos básicos, entre otros aspectos, como los que menciona:

"Desarrollo una reestructuración del universo interválico, un re-planteamiento en la manera de instrumentar, un recuestionamiento de los roles instrumentales, el planteamiento de la no-intención de la sucesión armónica, el establecimiento total de un papel no lineal y a la vez melódico de los instrumentos netamente rítmicos, la re-visualización de ciertos roles con respecto de estructuras como el walking (en jazz) el cual tendría ahora una importancia desde su construcción formal intrínseca, ajeno a una alineación armónica y a cualquier propósito de representación; una re-visualización de los arreglos. Todo esto sintonizado con las líneas ortogonales y la compacta limpidez de las superficies de Mondrian, sin abandonar la plástica personal que usaba, es decir, la del jazz".

Casi hedonista

La filosofía es otra de las vértebras en la espina dorsal de la búsqueda musical de Ramiro. A ella llegó en el verano de 1996, cuando comenzó a leer las obras de Platón.

"En un principio y con la evidente efervescencia de sentir los ambientes Socráticos a través del verbo de Platón, no fue posible constatar la ineluctable proporción directa que habría de producirse y era inevitable la amable seducción del abandono total, casi hedonista, al navegar y deambular por entre los soliloquios, divagaciones, conclusiones, demostraciones y los libres diálogos de Sócrates. Un día comprendí su concepto de ininteligibilidad. Mondrian establece el concepto de Realidad Abstracta y Realidad Figurativa y Platón alude al Mundo Sensible y Mundo Ininteligible".

- A la par de la lectura de los textos de Platón,
?qué buscas en lo musical?
- Lo abstracto, los sintagmas, el noumenos, el oximoron, aplicado al lenguaje a los determinantes y también utilizados como determinantes. Por otro lado he observado en mí una tendencia, una inclinación a supeditar todo los parámetros a lo armónico: forma y estructura, planos, capas, sintaxis, movimiento horizontal; y como otro factor en juego está la indagación y revalorización de y en la textura.

- Eres un reconocido cultor de la improvisación, ?se relaciona este interés con las lecturas que hiciste de Platón y tu percepción de las obras de Piet Mondrian?
- Me he hecho esa misma pregunta muchas veces. Me he interrogado acerca de las relaciones subliminales en las que encuentro tanta coherencia entre ambos actos y al mismo tiempo no encuentro la manera de expresarlo con palabras. Parece que se tratara de una acto tan puramente relacionado y ribosómico, tan desoxiribonucleico que el razonamiento desaparece ante una cristalina pureza que casi ni merece mención. Me encuentro con la explicación de la sin explicación y la visceralidad animal en un mismo cuarto (?y no era eso lo que quería acaso?). La relación va por el lado de que: el sumum del abstraccionismo sería justamente la anulación de la temporalidad como gestor, determinante y conector de la figuración. Al minimizar ese nexo semeotico, se produce una equidistante posición emisor-transductor-receptor (no importa de quienes se trate, puede ser incluso una sola persona) con respecto de los parámetros recibidos, pero para que este posicionamiento se acerque a la vera, siempre equidistante, este mismo (?paradójicamente?) debe estar en un constante movimiento espacio-temporal, redimensionando a cada milésima de segundo, sopesando, percibiendo la atmósfera para el siguiente movimiento. Y si esto no es abstraccionismo puro, entonces estoy super perdido.

- En algunas ocasiones te refieres a la improvisación "libre sin guiños", ? podrías explicarla?
- La improvisación o la llamada improvisación libre puede ser comprendida como una creación instantánea o como una composición en tiempo real o como un devenir o una expresión de la fugacidad basada en ciertos principios, donde hay distintos niveles y destrezas con el presente como meta. Entre otro par de factores, es un síntoma vital que asume el riesgo de una experiencia y es un flujo entre aquello que es hermoso, cambia según el tiempo y el eterno presente. La improvisación es un modo de hacer música tan antiguo como la música misma e incluye varios puntos fijos (armónicos, melódicos, rítmicos, de estilo, de timbre, etc. ) que respetan una cierta sintaxis. Hay quienes aseguran que en ciertos casos de improvisación ya no queda nada, pues se trata de clonar un cierto patrón de interpretación. Es posible constatar que la improvisación fue olvidada y en la actualidad es reinstalada en la escena contemporánea por la acción de una conjunción de creadores e intérpretes que confabulan por rotularla bajo la denominación de improvisación libre. En ese sentido, la improvisación libre es un gesto de recuperación que denota un acercamiento a la práctica de antaño sin que en rigor deba cambiar. Improvisar sobre progresiones de acordes es otro juego más, y recobrar esa libertad, tocando también un standard con una estructura, progresiones armónicas diatónicas y un código sintáctico, es también un proceso. En definitiva: Resultan ser lo mismo.

"Soy enseñante"

Al comentar su labor en la formación de músicos, Ramiro es categórico: "No soy profesor soy enseñante, no sé si existe esa palabra, pero la uso". El itinerario como "enseñante" comenzó en la década del noventa, cuando hacia clases de guitarra eléctrica, teoría y armonía en la Escuela de Música Projazz. Luego comenzó a enseñar en la carrera de Composición de la Escuela de Música Popular de la SCD, en el Taller de Ensamble y Producción y de Guitarra Eléctrica en el Centro Cultural Balmaceda 1215 y en el Taller de Armonía e Improvisación (2002) en el Instituto de Música de la Pontificia Universidad Católica de Chile. En la actualidad, es enseña arreglos, composición, armonía y audición dirigida en la Escuela de Música Popular de la SCD, y guitarra eléctrica en el Taller de Improvisación en la Facultad de Artes de la Universidad de Chile.

Explica su posición en la formación musical como una búsqueda más que como la llegada a algún puerto:

"La educación de la música significa un traspaso, un relevo, es hablar desde el músico, desde el compartir la duda más que la certeza. Es despertar la inquietud y la incertidumbre que moviliza a la toma de decisiones y opciones en la convicción que así y todo son circunstanciales. Quiero que hayan más músicos para poder deleitarme con la música que podré hacer con ellos en el futuro", argumenta.

Bandadas, la escena y la crítica

Otro rasgo visible en la huella musical de Ramiro es la creación de bandas, una ruta que inició adolescente con un conjunto sin nombre formado en el 1984, de cual recuerda:
"Era gente de distintos ambientes alumnos de la escuela donde estudiaba que a esa altura empezaba a tener ribetes de tal (Projazz), y que más que nada se trataba de profesores que hacían clase en ese subterráneo bajo el alero de George (Abufhele) y a estudiantes que estábamos todos en distintos menjunjes. Trabajábamos temas standards tratando de hacer lo que podíamos. Luchábamos contra los standards. Tratábamos de tocar algunos temas de jazz-rock y de bossa-nova. Era bastante taller.

Además ha integrado: Triunvirato: (1994), Equs (1995), Cuarteto Fedón (1996), Ramiro Molina Sexteto (1999) y Turangalila (las tres últimas de su creación).

- ?Cómo surge Turangalila?
- Como un taller sin grandes expectativas con Andi Baeza en batería y Edén Carrasco en saxo alto. La dirección del trabajo apunta a la denominada improvisación libre, concepto que tiende denotar un acercamiento total y extremo o verdadero para con la improvisación que no tiene puestas de acuerdo, sin estructuras ni planes de ningún tipo ni complicidades (más que las que se puedan dar en el momento) a veces con una puesta de acuerdo con respecto a la duración, que siempre termina no siendo tal, en fin, sin guiños. En ocasiones he sentido muy fuertemente que todo lo hecho hasta ahora ha sido una preparación para encontrarme con esta manera de hacer música.

- ?Por qué tu agrupación se llama Turangalila igual que la obra de Olivier Messaien?
- Después de algunos nombres e intentos salió este nombre, sabiendo que se trataba de la obra de Messaien. Un día llegó el disco y leímos el texto explicativo que decía que es una palabra que viene del sánscrito y que una traducción posible era turank que significa amor y muerte, y Lila que quiere decir sonidos. Por lo tanto amor y muerte en los sonidos. Nos quedamos mirando y ya estaba claro que después de eso, ese era el nombre.

- ?En qué estás ahora?, ? piensas hacer alguna nueva agrupación?, ?tienes algún nuevo romance musical, proyecto, obra inconclusa o anhelo artístico?
- Un trío con Alejandro Rivas (saxo barítono, alto y soprano) y Nicolás Ríos (batería) con quienes trabajo improvisación libre y composiciones pero con la inclusión siempre de sectores de improvisación libre. También trabajamos en otro trío con Daniel Navarrete (contrabajo) y Nicolás Ríos (batería). Es un trabajo muy de taller y muy de investigación celular en la improvisación libre. Además, estoy terminando una obra que llevo escribiendo hace cuatro años y ha tenido con silencios entremedio, quiero terminar de componerla para remontar el antiguo sexteto que ahora sería septeto (trompeta, saxo alto/ barítono, fagot, trombón, contrabajo, guitarra eléctrica y batería). Es algo así como la continuación del sexteto pero ahora incluiría inevitablemente lo que venía sospechando: la inclusión de pasajes de impro libre también. A pesar de todo la estética de este ensamble va más acorde con lo que se suele denominar jazz-contemporáneo con progresiones de acordes, bases, etc..

-?Cómo percibes la escena musical chilena?
- Una bomba de racimo en potencia. un coitus interruptus, un deseo frustrado, una esperanza que vale la pena vivir, una aspiración.

-?Puedes profundizar en el tema?
- Desde el quehacer intimo artístico reafirmo lo que digo: es una bomba de racimo en potencia. Es sorprendente como existe una concepción artística tan profunda. Quizás siempre fue así es estos lugares alejados a partir de esa sensación de isla que nos persigue y que en algún lugar de nuestro inconsciente nos obliga a tener que ver de algún punto de vista las cosas, aunque este punto de vista a veces se nos confunda con la copia, la clonación, la imitación y el eterno estar estirando el cuello por encima de la cordillera. En Chile existe una gran cantidad de músicos interesantes, con propuestas y cada vez más con una interesante amplitud de criterios. Si bien es cierto que sigue y por un buen tiempo más aún seguirá existiendo un éxodo de masa crítica, también lo es, que muchos estás decidiendo a pesar de todo conservarse aquí, porque resulta que algo que hay que hacer. Por otro lado viejos mecanismos enquistados en nuestra biografía colectiva, atentan en la relación y en la no relación entre los músicos: miradas puestas en puntos que no son lo relevantes, miopías que no permiten discriminar entre lo esencial y lo circunstancial, falta de rigor en el trabajo artístico en alguno casos, una sublimación inútil del recurso y no del concepto, y su vez una menguada y vetusta concepción de la técnica desligada del contexto en el que se desarrolla y de las necesidades del lenguaje; o sea la técnica por la técnica, una concepción excesivamente de oficio, pero más bien una sobre valoración del concepto del cancherismo, aún arraigado en algunos círculos y no hablo sólo de la música popular sino también de la docta y de la impopular (cito a Arnold Schoenberg), las animosidades entre los músicos, en la mayoría de los casos infundadas y completamente antojadizas, creadas por el habla consuetudinaria, el temor a lo distinto. En cuanto a las políticas y el entramado que están detrás del hacer musical, sustentando el arte oficial (cito a Jean Cassou) y en este caso, la música oficial, es como estar hablando otro idioma, el leit motiv que persiguen tiene que ver con los marcos de venta, de producción, de comercialización de un producto, es decir, es una jerga que se acerca más a una gran venta de supermercado, y en otros casos a cuestiones de orden político en relación una cierta disposición a pregonar una contenido equis de una cierta manera y, proponiendo un homenaje póstumo a un señor o señora zeta. En este asunto no se habla de música sino que de tendencias de turno que nada tienen que ver con el real movimiento del triángulo (cito a Kandinsky). Pero ?Ha sido alguna vez de manera distinta?. Así es que: ?Qué sigan manteniendo cifras y autoindemnizándose y autocomplaciéndose con palabras como cultura, arte y música, que de tanto manosearlas han llegado a obtener un vacío semántico en ellas.

- ?Qué actitud asumes?
- La única manera de hacer frente a esta insensatez está en el hacer a toda costa, en generar las tan llamadas corrientes alternativas de acción, el apoyo mutuo como factor de la evolución (cito a Kropotkin), es decir, en este caso generar fuerza de conjunto subyacente, y simplemente exteriorizar en forma independiente y finalmente jugar el mismo juego si se quiere pero con naipe propios o al menos sin cartas marcadas.

- ?Cuál es tu autocrítica como músico?
- Me falta escuchar más y mejor, aún menos notas, menos notas y más sonidos, aprender a buscar con más paciencia el momento, el espacio y el color se me escapan, siempre se me huyen. Soy muy lento, apenas puedo agarrar unos granos de arena de todo un cúmulo de sonidos que la existencia o el éter se esmera por arrojarte a los oídos diariamente, me pongo impaciente.


(Entrevista realizada por Milena Bahamonde en agosto de 2005)


Discografía de Ramiro Molina

1.- "Fedón" (1998)
Cuarteto de Jazz Contemporáneo, Fedón (Ramiro Molina, guitarra eléctrica; Patricio Pailamilla, trompeta; Alejandra Santa Cruz, contrabajo y Rodrigo Pardo, batería)
Todas las composiciones registradas en "Fedón" fueron realizadas por Ramiro Molina.

2.- "Cuadrivio" (2001)
Ensamble Quadrivium y otros instrumentos (Felipe Hidalgo, violín; Daniella Rivera, violín; José Carlos dos Santos, viola; Celso López, violoncello; Sergio Cabrera, flauta; Jorge Levin, Clarinete y Patricio Hernández, percusión). Las obras fueron compuestas por Ramiro Molina, Alberto Cumplido, Javier Farías y Sebastián Rehbein.

3.- "Antología de Jazz" (2002). Incluye la participación de Turangalila (Ramiro Molina, guitarra eléctrica; Andi Baeza, batería; y Edén Carrasco, saxo alto) con improvisaciones de creación colectiva. álbum doble y primero de los compilados de jazz en torno a la Facultad de Artes de la Universidad de Chile.

4.- "Prolapsus" (2003)
Prolapsus (Lorenzo Román, guitarra; Paulo Gallegos, teclados; y Pablo Soza, batería).

Grabación independiente, realizada en estudios Batuke, en Santiago de Chile.
CATáLOGO DE OBRAS

(Por orden cronológico de composición)

1.- "Voyeur"
París, Francia, 1991
Obra incidental para: guitarra y medios electrónicos (teclados y caja rítmica)
Registrada por Ramiro Molina
Sin publicación

2.- "Diciembre Azul "
París, Francia, 1992
Obra de jazz fusión para: saxo tenor, guitarra eléctrica, bajo y batería
Compuesta para el video educacional "Colores al desnudo 2"
Registrada por Ramiro Molina y músicos franceses
Sin publicación

3.- "Colores al Desnudo "
París, Francia, 1992
Obra de jazz fusión para saxo tenor, guitarra eléctrica, bajo y batería
Compuesta para el video educacional "Colores al desnudo 2"
Registrada por Ramiro Molina y músicos franceses
Sin publicación

4.- "Cuenta hasta tres "
París, Francia, 1992
Obra de jazz fusión para saxo tenor, guitarra eléctrica, bajo y batería
Compuesta para el video educacional "Colores al desnudo 2"
Registrada por Ramiro Molina y músicos franceses
Sin publicación

5.- "Tren urbano ó Arquetipo "
París, Francia, 1992
Obra de jazz fusión para saxo tenor, guitarra eléctrica, bajo y batería
Compuesta para el video educacional "Colores al desnudo 2"
Registrada por Ramiro Molina y músicos franceses
Sin publicación

6.- "Canción para una noche tranquila "
París, Francia, 1992
Balada de jazz fusión para saxo tenor, guitarra eléctrica, bajo y batería
Compuesta para el video educacional "Colores al desnudo 2"
Registrada por Ramiro Molina y músicos franceses
Sin publicación

7.- "Entre gallos y medianoche?.. "
París, Francia, 1992
Obra de jazz fusión para saxo tenor, guitarra eléctrica, bajo y batería
Compuesta para el video educacional "Colores al desnudo 2"
Registrada por Ramiro Molina y músicos franceses
Sin publicación

8.- "?Has andado??..? "
París, Francia, 1992
Obra de jazz fusión para saxo tenor, guitarra eléctrica, bajo y batería.
Compuesta para el video educacional "Colores al desnudo 2"
Registrada por Ramiro Molina y músicos franceses
Sin publicación

9.- "Memorias de un halcón peregrino "
París, Francia, 1992
Obra de jazz fusión para saxo tenor, guitarra eléctrica, bajo y batería
Compuesta para el video educacional "Colores al desnudo 2"
Registrada por Ramiro Molina y músicos franceses
Sin publicación

10.- "??No copies no!!"
París, Francia, 1992
Obra pop para saxo tenor, guitarra eléctrica, bajo y batería
Compuesta para el video educacional "Colores al desnudo 2"
Registrada por Ramiro Molina y músicos franceses
Sin publicación

11.- "Desierto Carmesí"
París, Francia, 1992
Obra incidental para saxo tenor, guitarra eléctrica, bajo y batería
Compuesta para el video educacional "Colores al desnudo 2"
Registrada por Ramiro Molina y músicos franceses
Sin publicación

12.- "Triángulo sepia"
Santiago, Chile, 1994
Obra contemporánea e incidental para medios electrónicos
Compuesta para la obra de danza de Marcelo Sepúlveda "Triángulo Sepia"
Registrada por Ramiro Molina
Sin publicación

13.- "Afolia"
Santiago, Chile, 1997
Obra contemporánea para cuarteto de cuerdas
Compuesta para "Pandemónium - Reunión de demonios en un solo acto, impresiones sobre fin de siglo", una puesta en escena de música, danza, poesía y pintura creada por los músicos Alberto Cumplido, Ramiro Molina y el poeta Andrés Morales.
Sólo ha sido interpretada en la obra "Pandemónium"
Sin publicación

14.- "Terpsicore"
Santiago, Chile, 1997
Obra contemporánea para quinteto de cuerdas
Compuesta para "Pandemónium - reunión de demonios en un solo acto, impresiones sobre fin de siglo", una puesta en escena de música, danza, poesía y pintura creada por los músicos Alberto Cumplido, Ramiro Molina y el poeta Andrés Morales.
Sólo ha sido interpretada en la obra "Pandemónium"
Sin publicación

15.- "Periplo"
Santiago, Chile, 1997
Obra contemporánea e incidental para medios electrónicos
Compuesta para la obra de teatro "Periplo" realizada por la compañía de teatro de Mónica Martínez.
Registrada por Ramiro Molina
Sin publicación

16.- "Siglo 0"
Santiago, Chile, 1998
Obra contemporánea e incidental para medios electrónicos
Compuesta para coreografía de danza "Siglo O" de Mariela Cerda.
Registrada por Ramiro Molina
Sin publicación

17.- "Cinco visiones de un lunes"
Santiago, Chile, 1998
Obra de jazz contemporáneo para guitarra eléctrica, trompeta, contrabajo y batería
Registrada por Ramiro Molina, Patricio Pailamilla, Alejandra Santa Cruz y Rodrigo Pardo
Publicada en el disco "Fedón"

18.- "ABT 1"
Santiago, Chile, 1998
Obra de jazz contemporáneo para guitarra eléctrica, trompeta, contrabajo y batería
Registrada por Ramiro Molina, Patricio Pailamilla, Alejandra Santa Cruz y Rodrigo Pardo
Publicada en el disco "Fedón"

19.- "Bocetos"
Santiago, Chile, 1998
Obra de jazz contemporáneo para guitarra eléctrica, trompeta, contrabajo y batería
Registrada por Ramiro Molina, Patricio Pailamilla, Alejandra Santa Cruz y Rodrigo Pardo
Publicada en el disco "Fedón"

20.- "Azul sobre gris"
Santiago, Chile, 1998
Obra de jazz contemporáneo para guitarra eléctrica, trompeta, contrabajo y batería
Registrada por Ramiro Molina, Patricio Pailamilla, Alejandra Santa Cruz y Rodrigo Pardo
Publicada en el disco "Fedón"

21.- "Cuatro pequeños trazos"
Santiago, Chile, 1998
Balada contemporáneo para guitarra eléctrica
Registrada por Ramiro Molina
Publicada en el disco "Fedón"

22.- "Aventura cúbica"
Santiago, Chile, 1998
Obra de jazz contemporáneo para guitarra eléctrica, trompeta, contrabajo y batería
Registrada por Ramiro Molina, Patricio Pailamilla, Alejandra Santa Cruz y Rodrigo Pardo
Publicada en el disco "Fedón"

23.- "Mira que te miro Birli a través de una ventana oval"
Santiago, Chile, 1998
Obra de jazz contemporáneo para guitarra eléctrica, trompeta, contrabajo y batería
Registrada por Ramiro Molina, Patricio Pailamilla, Alejandra Santa Cruz y Rodrigo Pardo
Publicada en el disco "Fedón"

24.- "árboles"
Santiago, Chile, 1997
Obra de jazz contemporáneo para guitarra eléctrica, trompeta, contrabajo y batería
Sin publicación

25.- "Tango 1 ó Impertérrito"
Santiago, Chile, 1999
Obra de jazz contemporáneo para flauta traversa, trompeta, fagot, guitarra eléctrica, contrabajo y batería
Registrada por Gabriel Cruz, Sergio Contreras, Nelson Vinot, Ramiro Molina, Cristián Espiñeira y Felipe Candia
Sin publicación

26.- "Dunas y Destellos"
Santiago, Chile, 2000
Obra de jazz contemporáneo para flauta traversa, trompeta, fagot, guitarra eléctrica y fretless, contrabajo y batería
Registrada por Gabriel Cruz, Sergio Contreras, Nelson Vinot, Ramiro Molina, Cristián Espiñeira y Felipe Candia
Sin publicación

27.- "ABT 2" 1? versión
Santiago, Chile, 1999
Obra de jazz avant-garde para guitarra eléctrica, contrabajo y batería
Registrada por Ramiro Molina, Alejandra Santa Cruz y Rodrigo Pardo
Sin publicación

28.- "ABT 2" 2? versión
Santiago, Chile, 2000
Obra de jazz avant-garde para flauta traversa, trompeta, fagot, guitarra eléctrica, contrabajo y batería
Registrada por Gabriel Cruz, Sergio Contreras, Nelson Vinot, Ramiro Molina, Cristián Espiñeira y Felipe Candia
Sin publicación

29.- "Soliloquio"
Santiago, Chile, 2000
Obra de jazz avant-garde para guitarra eléctrica, contrabajo y batería
Registrada por Ramiro Molina, Cristián Espiñeira y Felipe Candia
Sin publicación

30.- "Dialéctica para dos Syntagmas"
Santiago, Chile, 2000
Obra de jazz avant-garde para guitarra eléctrica fretless, contrabajo y batería
Registrada por Cristián Espiñeira y Felipe Candia
Sin publicación

31.- "Detrás de la ventana"
Santiago, Chile, 2001
Obra de jazz avant-garde para guitarra eléctrica afinación ABT, saxo alto y batería
Registrada por Ramiro Molina, Edén Carrasco y Andi Baeza
Sin publicación

32.- ".y una vez fijados ciertos instantes?"
Santiago, Chile, 2001
Obra de jazz avant-garde para guitarra eléctrica, contrabajo y batería
Sin registro ni publicación

33.- "Sueños hermenéuticos"
Santiago, Chile, 2001
Obra contemporánea para cuarteto de cuerdas, flauta en sol, clarinete bajo, percusión
Registrada por Felipe Hidalgo, Daniella Rivera, José Carlos dos Santos, Celso López, Sergio Cabrera, Jorge Levin y Patricio Hernández
Publicada en el disco "Cuadrivio"

34.- "Otra ventana oval"
Santiago, Chile, 2001
Obra contemporánea para cuarteto de cuerdas, flauta en sol, clarinete bajo, percusión
Registrada por Felipe Hidalgo, Daniella Rivera, José Carlos dos Santos, Celso López, Sergio Cabrera, Jorge Levin y Patricio Hernández
Publicada en el disco "Cuadrivio"

35.- "Improvisación #2"
Santiago, Chile, 2002
Improvisación libre para guitarra eléctrica, saxo alto y batería
Registrada por Ramiro Molina, Edén Carrasco y Andi Baeza
Publicada en el disco "Antología de Jazz"

36.- "Improvisación #3"
Santiago, Chile, 2002
Improvisación libre para guitarra eléctrica, saxo alto y batería
Registrada por Ramiro Molina, Edén Carrasco y Andi Baeza
Publicada en el disco "Antología de Jazz"

37.- "Improvisación #7"
Santiago, Chile, 2002
Improvisación libre para guitarra eléctrica, saxo alto y batería
Registrada por Ramiro Molina, Edén Carrasco y Andi Baeza
Publicada en el disco "Antología de Jazz"

38.- "Improvisación #11"
Santiago, Chile, 2002
Improvisación Libre para guitarra eléctrica, saxo alto y batería
Registrada por Ramiro Molina, Edén Carrasco y Andi Baeza
Publicada en el disco "Antología de Jazz"

39.- "Proimpro"
Santiago, Chile, 2003
Improvisación libre para teclados, dos guitarras eléctricas, batería
Registrada por Paulo Gallegos, Lorenzo Román, Ramiro Molina y Pablo Soza
Publicada en el disco "Prolapsus"

40.- "Noumenos"
Santiago, Chile, 2004
Obra de jazz avant-garde e improvisación libre para saxofón barítono y alto (un solo instrumentista), guitarra eléctrica Fretless, guitarra eléctrica y guitarra eléctrica preparada con afinación propia ABT o de racimo. Fue presentada en el Festival de Música Contemporánea de la Facultad de Artes de la Chile (2004)
Registrada por Ramiro Molina, Alejandro Rivas y Andi Baeza
Sin publicación

41.- "Por ahora"
Santiago, Chile, 2005
Obra de jazz avant-garde e improvisación libre para guitarra eléctrica, saxo barítono y batería
Sin registro ni publicación


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